Los rusos no perdonaron

See on Scoop.it – Revista Magnesia

El equipo ruso de gimnasia artística varonil sorprendió en el pasado Campeonato Europeo de gimnasia artística en Sofía, Bulgaria, con la mayoría de los títulos continentales, mientras que Gran Bretaña tuvo un resultado gris comparado con sus expectativas y antiguos logros.

La gimnasia varonil de Rusia renació, y ahora junto con los británicos, chinos y japoneses apuntan a luchar las medallas por equipos en el Campeonato Mundial de gimnasia de este año. Pero la gran figura del europeo fue el ruso Denis Ablyazin con cuatro títulos europeos, es decir, tuvo una efectividad de 100%, porque en todas las pruebas en que concursó logró ser campeón.

La final por equipos parecía ser un trámite sin grandes complicaciones para los británicos, sin embargo, al final los rusos obtuvieron grandes notas en las pruebas donde tenían especialistas. Una de las grandes razones de la derrota británica fueron los accidentadas rutinas en anillos donde los rusos les aventajaron por casi tres puntos. No obstante, en la penúltima prueba los británicos remontaron con grandes ejercicios en piso ubicándose a menos de un punto de los rusos, pero en la siguiente rotación todo se desvaneció con la caída de Daniel Purvis en el caballo con arzones.

Al final de la prueba por equipos Rusia obtuvo 267.959 puntos; Gran Bretaña 265.953; y Ucrania 262.087 puntos. Éste último país por fin pudo sobresalir en una competencia tan relevante como es el europeo después de su traumático cuarto lugar en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

Denis Ablyazin

En las finales por aparatos parecía que los británicos se recuperarían con su joven figura Max Whitlock, pues en dos pruebas era el primer clasificado, sin embargo el ruso Denis Ablyazin no se cansó de ver su nombre en la primera posición y salió triunfante en la final de piso, anillos y salto.

En piso derrotó al griego Kosmidis (plata), al británico Purvis (bronce)y al israelí Shatilov (bronce). En anillos empató en primer lugar con su compañero de equipo Balandin, y el bronce se lo quedó el galo Ait Said. En salto el ruso fue quien presentó mayor dificultad y eso le valió para escuchar su himno nacional en la ceremonia de premiación, la plata y el bronce fueron para los ucranianos, Radivilov y Verniaiev.

Otro grato resultado fue el conseguido por Oleg Verniaiev, quien siempre en los torneos importantes su rendimiento se veía aminorado en comparación con su talento y dificultad. El ucraniano por fin pudo obtener su primera medalla aurea en un europeo en la final de barras paralelas. Oleg ganó con relativo margen al ruso Belyavsky, mientras que el holandés Zonderland se fue a la tercera posición. Éste mismo volvió a demostrar su hegemonía en la barra fija donde ya tiene todos los títulos que un gimnasta desearía tener, campeón olímpico, mundial y  europeo. Pero en Sofía, Bulgaria, volvió a demostrar su maestría en la barra. Zonderland le sacó al segundo lugar un punto, bastante, si se considera que era una final y donde solo se presentan los mejores. La plata y el bronce fueron para Gran Bretaña.

Epke Zonderland en la prueba de barra fija.

La única prueba donde los europeos de la isla del norte escucharon su himno fue en la final de caballo con arzones, donde Max Whitlock tuvo que vencer al campeón olímpico, el húngaro Berki, y obtener el único título que les devolvió algo de orgullo a los británicos quienes pensaban que el europeo estaría marcado por su hegemonía y su creciente escuela que sorprendió en la rama juvenil.

Gran Bretaña se vio superado por Rusia claramente, y si desean pelar los metales en el Campeonato Mundial deberán presentar mejores rutinas en anillos, porque Rusia tiene muy buenos especialistas en todos los aparatos, que incluso pueden marcar pauta a nivel mundial. El mundial será en China y aunque ningún país europeo ni americano son los favoritos, una combinación de resultados puede garantizar una sorpresa.

Escrito por Daniel Ortega.

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